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En la noche, bajo el cielo estrellado, Caminamos sin rumbo, sin miedo al pasado. Las calles nos llaman, el viento susurra, Historias de gloria que nunca se ocultan. ¡Somos la llama que nunca se apaga! ¡Gritamos alto, nuestra voz nunca calla! En este viaje sin fin, bajo el manto del rock, Somos leyenda, somos la revolución. Con guitarras al viento, y corazones ardientes, En cada acorde, nuestras almas presentes. El ritmo nos lleva, nos arrastra la marea, Con fuerza imparable, como un trueno que truena. ¡Somos la llama que nunca se apaga! ¡Gritamos alto, nuestra voz nunca calla! En este viaje sin fin, bajo el manto del rock, Somos leyenda, somos la revolución. Cada nota es un grito de libertad, Cada verso, un sueño por conquistar. No hay cadenas que nos puedan atar, Somos el eco de un mundo que quiere cambiar. ¡Somos la llama que nunca se apaga! ¡Gritamos alto, nuestra voz nunca calla! En este viaje sin fin, bajo el manto del rock, Somos leyenda, somos la revolución. Y cuando el último acorde haya sonado, Cuando el silencio intente dejarnos de lado, Seremos recuerdo, seremos inmortal, Porque en cada corazón, el rock vivirá sin final.