歌词
Juani el papi, Erase una y otra vez, es el mundo al revés.
Mundo ilusorio, material y rebosado de botox,
símbolo de purgatorio, control mental y espíritus rotos.
Inmundo vejatorio, virtual, saturado de selfies y fotos,
oscuro reservorio, penal, desbordado de likes y corazones rotos.
Convertido en nido de siliconas y hormonas, de esteroides y anabolizantes, tu mismo.
Fuisteis advertidos y no habéis aprendido, Sodoma y Gomorra de humanoides zombificantes del transhumanismo.
Esto no es un cuento ni me lo invento,
saca talento, abre tus ojos, permanece atento.
Yo no me arrendo ni me vendo,
es conocimiento, yo entro y salgo como el viento.
Oye el rugido del firmamento en movimiento,
la vibración del universo transmitiendo.
Los corazones laten fuerte en los inviernos,
siento mi alma resurgiendo en los avernos.
Suelto los versos por si te calan dentro,
como la lluvia si te pilla sin techo.
Aguanto el llanto por tanto sufrimiento,
sostengo el tempo con un conciso intento.
Hago un inciso como un lamento lento,
congelo el tiempo en un momento eterno.
Viajes astrales, paseos espaciales,
cuerpos etéricos entre varias densidades.
Juani el papi, no os librareis, Pagaréis todas vuestras maldades.
Ilusionista atravesando el velo de la ilusión;
especialista desvelando la programación,
malabarista en lo alto de los trapecios,
contorsionista buceando entre los pecios,
funambulista con vértigo si mira al cielo.
Mundo surrealista y colgado, con alevosía y subyugado,
Ignorando los gritos de al lado, aunque sean del mismo ganado.
No soy héroe del silencio ni del fado, pero te juro que de la Matrix yo me salgo
Suelta tus miedos, sólo te infunden pánico,
así confunden para que actúes errático.
Conspiranóico antes que esclavo robótico,
se tu placebo y sal del sueño hipnótico.
Aprieta tus puños, rompe tus cadenas,
sal de tu zulo, la mente es tu condena.
No infles ego en un mundo lleno de espinas,
o acabarás vendiendo tu alma en las esquinas.
Sal del engaño y escapa del rebaño,
consume y asume que vendrá tu daño.
Oye el quejido de humanos marginados,
un sin sentido, todos miran para otro lado.
Poder corrupto, podrido y viciado,
ocultos cultos manejan el tinglado.
Mundo tejido con redes invisibles,
desde el sombrío desechan lo inservible.
