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1.1. Enfoque Técnico.
El enfoque técnico es presentado Tyler y desarrollado en la educación luego de la Segunda Guerra mundial entre 1950 y 1960 en EEUU, con las aportaciones de diversos trabajos realizado por profesores y psicólogos influenciados por las corrientes conductistas y neoconductistas del aprendizaje, quienes desplegaron acercamientos al tema del currículum, a partir de las teorías de la comunicación, la instrucción y administración mediadas por las tendencias de la época en la producción en serie y la perspectiva sistémica (Pascual-Kelly E. , 1998).
De acuerdo con Malagón, Rodríguez, & Ñáñez, (2019), posteriormente, el enfoque técnico es desarrollado por otros autores como: Bloom con la taxonomía de objetivos educacionales, Mager y Popham, con su propuesta de objetivos operacionales o conductuales, Popham y Baker, que forjan al currículum y su elaboración como una declaración ordenada de objetivos de aprendizaje. Asimismo, Skinner con las teorías del conductismo y el refuerzo operante; Gagné, con las unidades de contenido adquiridas bajo ciertas condiciones de aprendizaje, la instrucción programada, la jerarquía y tipos de aprendizaje; Mager, quien propone que dichos resultados se traduzcan en comportamientos específicos definidos operacionalmente, se emplearon instrumentos de evaluación del rendimiento, que asintieran el cálculo y demostración de los productos del aprendizaje (Pascual-Kelly E. , 1998).
Bobbit (1918) y Tyler (1986), son los más destacados representantes de este enfoque. Bobbit (1918) definió el currículum, desde la perspectiva del aprendizaje, las habilidades y destrezas que debían alcanzar los estudiantes para su desarrollo en la sociedad, sin embargo, su énfasis está en los resultados de éstos aprendizajes, por lo cual el currículum se limita al alcanzar los objetivos finales de la conducta o habilidad lograda a partir de ciertos medios didácticos. Es posible afirmar que esta es una perspectiva “eficientista” y pragmática del currículum, la cual se convirtió en la fuente del pensamiento educativo para la época. Bobbit aplicaba al proceso educativo los sistemas de gestión empleado en la fábrica, de modo que seguía los planteamientos de las teorías administrativas de Taylor aplicados a la educación (Díaz Barriga, 1989).
Tyler (1986), concibe al currículum como un programa de enseñanza, planificado, definido a partir de metas y objetivos de educación que orientan la selección del material, los contenidos programáticos, el procedimiento para la enseñanza y la preparación de pruebas y exámenes, lo que compete a la evaluación, cada uno de estos aspectos son medios que permiten lograr las propósitos fundamentales de la educación.
Ambos autores promueven una planificación racional en la que los medios conduzcan a determinados fines, haciendo énfasis en los resultados o productos de la enseñanza y no necesariamente en el proceso, como consecuencia de la instrucción y la definición de objetivos así como el establecimiento
